lunes, 4 de agosto de 2008

LA PALABRA DEL DIRECTOR

"Mercaderes de la justicia quieren acabar con el mensajero"

¡ NO A LA MORDAZA ¡

Por: Enrique Lazo Flores
Los riesgos que sufren los periodistas están echados al olvido por el gobierno actual y eso esta alentando a que sufran atentados como lo sufrió las instalaciones el Diario El Puerto La Región.
Es que deviene de una reacción negativa de quienes tienen una actitud que linda con la corrupción en sus diferentes modalidades, y se siente perseguidos por la incisiva fiscalización a lo que son sometidos por la prensa. Esa actitud los hace sentirse aludidos, y en lógica reacción intentan aplicar métodos de amedrentamiento e invitan al periodista, hacer un seguimiento que muchas veces incomoda, pero esa es la labor del periodista y eso se debe respetar.
De otro modo el periodista, sería cómplice de los hechos delictuosos que cometen los que realmente están implicados en actos de corrupción. No con ello quiero poner las manos al fuego por otros.
Los hechos que suscitan con este medio de comunicación, como son las querellas y las acciones de amparo, no han hecho otra cosa, sino dejar al descubierto que entre las autoridades, sobre todo policiales, hay intensiones de maniatar y amordazar a la prensa, utilizando una serie de argumentos mucha veces jalados de los cabellos, y asesorados, no por luminarias en derecho, menos, inteligentes asesores, que solo han hecho hacerse conocidos en el ámbito judicial como los mercaderes de la justicia, intentando acabar con el papel de mensajero que cumple el comunicador social y de ese modo no permitir que llegue el mensaje a la comunidad.
Craso error, repitiendo el mismo lenguaje que utilizan los aludidos en este caso, señalo en mi humilde apreciación, que la intención de amedrentar vía agresiones físicas, ó, desplegando una serie de psicosis colectiva, como es la rotura de ventas y atentados verbales, no lograran tapar la boca, menos maniatar las manos para escribir, ó, pidiendo al Poder Judicial una sanción monetaria, y que deje el cargo, lograran que el derecho de información cumpla con su cometido.
“Solo los corruptos temen ser fiscalizados”, reza el dicho de la madre ciencia, por lo tanto es loable destacar el papel de los vocales, para no dejarse influenciar por argumentos legales, huérfanos de doctrina legal, desarrollados por mentes trasnochadas, salidos de noches de bullín y envueltos de negro humo.
Si me equivoco, pues ayúdenme a corregir y salir de mi precariedad, pero en un día claro, de intensa luz que permita traslucir las ideas, para ser respondidas también con ideas, pero jamás con argumentos vedados y que son dirigidos a poner la mordaza, porque eso no debe pasar jamás.
Tengo plena confianza en la Justicia, sea divina ó impartida por el Hombre, porque ambas persiguen el mismo fin, aunque le temo a la justicia del hombre, porque viene del hombre, mas no a la divina porque viene del creador, y solo él sabe lo que hace y tendría que ser imbécil para no creer en él, y siendo imbécil, tendría mas cerca el negro humo de la yerba que me haga soñar, que puedo desafiar al supremo Juez que es Dios. Y convencer a los jueces para que me alcancen la mano,
En mi condición de humilde mensajero, escribo estas líneas, dirigido para quienes torturan el mensaje con zancadillas verbales, pretendiendo ver retorcidos en el piso el derecho de expresión, cual víboras que se arrastran por un poco de yerba, esperanza convertido en humo que les iluminan sus mentes, y asi sobrevivir en el oscuro lenguaje de la corrupción, acaso algún día un iluminado pida que se legisle sobre el derecho de pedir que un abogado antes de sentarse en su curul para debatir una defensa, pase primero por un dosaje etílico, o una prueba anti doping. Solo asi acabaremos con los que pretenden acabar con el derecho de la Libre Expresión.